Recientemente
y coincidiendo con la aparición de una lista opositora algunos de sus
integrantes insultan o se burlan de aquellos socios que sugieren que la
información debe ser transmitida o recibida preferentemente a través del
Centro.
¿Cómo
se informa uno correctamente si no se va a la fuente? Sin ser expertos podemos
darnos cuenta que la información que no sale de la fuente o de los verdaderos
interesados casi siempre llega incompleta, distorsionada o falsa. ¿Por qué es
malo entonces llamar al centro o concurrir a él?
Nos
gusta ir al centro. No pensamos que por concurrir con frecuencia tengamos la
garantía de estar bien informados, eso dependerá de nuestro grado de atención a
los informes del presidente o incluso de las preguntas u opiniones que podamos formular
para completar o aclarar los informes. Nos gusta ir al centro, nos sentimos
como en casa, una casa que compartimos con los colegas, allí obviamente
trabajan los que nos representan y las personas que realizan la labor
administrativa, sentimos la pertenencia, por derecho y cuando decimos “querido
centro” sentimos un auténtico cariño en la expresión.
Perdón,
pero no entiendo esa postura de la lista opositora de enojarse e incluso burlarse de
aquellos que sugerimos que para estar bien y seguramente informado hay que ir o
llamar a nuestro Centro.
¿Cómo
sería entonces con ellos? ¿Será que no habrá que ir ni llamar? ¿No quieren
que nadie les pregunte nada, que nadie los interpele?, ¿Será eso lo que buscan
con esta nueva costumbre de burlarse o insultar a los que sugieren lo
contrario? Manifiestan que toda la información que necesita el socio debe ser
remitida por las redes sociales, ¿Dónde queda el dialogo? ¿Dónde la pregunta,
la repregunta o la aclaración? ¿Dónde queda la participación?
Podremos
sentirnos en el Centro como en nuestra casa, la verdad no lo es (aunque tenga
muchas semejanzas) el Centro es un gremio “un sindicato” con 100 años de
existencia y personería gremial, lo que le da una entidad que tal vez muchos
ignoren, es difícil entender, por ejemplo, que los integrantes de la lista opositora pretendan dirigir el Centro “pero” no están de acuerdo que sea un sindicato,
nunca escuchamos una contradicción mayor.
Tiempos
muy difíciles son los que nos toca vivir, nadie en su sano juicio anda
ventilando su patrimonio o a dónde va ni por cuanto tiempo. “El gremio es una
asociación de trabajadores que se
desarrolla para defender los intereses financieros, profesionales y sociales
vinculados a las tareas que llevan a cabo quienes la integran (definición de Wikipedia).
Defender? Sí, dice defender, de qué? de quién? Es evidente que es muy
importante identificar aquello que pueda perjudicar a un trabajador; pero
volviendo al tema del inicio, ningún individuo integrante de esta asociación
debería poner por delante su derecho individual a estar informado por encima de
los intereses del colectivo. Si para satisfacer la comodidad del derecho
individual a la información ponemos en riesgo patrimonio y estrategias que
involucran a todos, se pierden herramientas de defensa; no es necesario hacer
un análisis de las consecuencias.
La Lista Blanca es una agrupación que nació con el retorno a la
democracia en 1982, son 36 años desde la vieja sede de la calle Bolivar (donde
hoy está la FUENN) hasta la actual de Independencia y Perú. No existe una red
social donde quepa tanta trayectoria, La Lista Blanca nació ejerciendo la
libertad sindical y la democracia, jamás perdió esa esencia. Cualquier socio de
buena voluntad puede participar. Para la Lista blanca las asambleas son el
órgano soberano por excelencia donde todos tenemos voz y voto. Incluso las
reuniones de Comisión Directiva de los jueves son abiertas a todos los socios
donde pueden expresarse libremente.
Cada jueves es un examen para el Presidente del Centro de Capitanes quien
una vez por semana debe informar y exponer el curso de nuestro Centro. Tal vez
este sea el motivo de intentar estigmatizar a los socios que entendemos que la
participación y la información deben hacerse puertas adentro, libremente, pero
puertas adentro. Los integrantes de la lista opositora hoy insultan nuestra
inteligencia si piensan que la Lista Blanca abandonará la tradición de la
democracia participativa, siempre vamos a estar para vigilar los intereses del
colectivo Centro de Capitanes de
“Ultramar” y Oficiales de la Marina Mercante.